Concluye la campaña Salvemos al chorlitejo patinegro en el litoral sanluqueño

Ecología

Tras seis meses de trabajo de voluntariado, parece que la población reproductora vuelve a asentarse en las playas de Sanlúcar.

Con respecto al año pasado, las segundas puestas han podido reducirse debido a las olas de calor, durante el mes de julio.

El grupo de voluntariado colaborador dentro de la campaña “Salvemos al Chorlitejo patinegro”, coordinado por Agaden-Ecologistas en Acción y grupos locales, donde han participado catorce municipios de la provincia gaditana, comienza su trabajo en Sanlúcar el primer fin de semana del mes de marzo, finalizando el último fin de semana del mes de agosto. Han sido 6 meses desempeñando labores de perimetrado, de vigilancia y control, autorizada por la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible de Cádiz, para que la especie pueda ampliar su población en este tramo de litoral. En el ejercicio anterior 2021 hubo 34 puestas, este año hemos llegado a 31. Podemos decir que Sanlúcar ha sido uno de los municipios dentro de esta campaña provincial (participan 14 localidades Cádiz, San Fernando, Chipiona, Algeciras, Chiclana, Sanlúcar, el Puerto, Rota, La Línea, Trebujena, Conil y Vejer) más éxito reproductor ha tenido.

Se decidió empezar más pronto este año, porque se estaba observando que varias parejas procedentes del Norte de África y de Europa, ya habían elegido territorios para nidificar, coincidiendo con las mismas zonas del año pasado, por lo cual iniciamos los trabajos de perimetrado al final del paseo marítimo, en la playa urbana de Las Piletas e inmediatamente pasados unos días, en la playa de La Jara. Se ha finalizado más tarde, porque los jóvenes volantones utilizaban las áreas perimetradas como zonas de refugio, en las horas de máxima afluencia de usuarios.

Durante estos meses se han repetido las amenazas que han afectado en el aumento de pollos, perros sueltos, depredación por otros animales, mareas vivas, tránsito de personas en las dunas. Pero la causa a tener muy en cuenta, es la limpieza diaria de residuos con maquinaria pesada (tractor) en las dunas embrionarias, pudiendo provocar la eliminación de más nidos además de matar pollos recién nacidos. Las aves no distinguen lo que es una zona de protección de la que no lo es.

Del mismo modo, las labores de vigilancia y control de los voluntarios casi a diario, han logrado cumplimentar 136 registros de datos de seguimiento, que serán recopilados en una base de datos que se emitirán a la Delegación Territorial de Cádiz. Se ha llevado a cabo con grupo de escolares, conocimiento de este ecosistema costero. Se han mantenido contactos con las autoridades competentes (policía local, agentes de medio ambiente y guardia civil) y por supuesto, sin este voluntariado, no hubiera sido posible delimitar las zonas de nidificación, para que esta especie costera no sufra alteraciones en el comportamiento reproductor. El primordial objetivo de la campaña es lograr recuperar la población de nuevos individuos en la provincia de Cádiz, diezmada en esta última década, a consecuencia de actuaciones no autorizadas en la franja de litoral de ciertos ayuntamientos. Todo el trabajo recabado será plasmado en informes, que se enviarán a las administraciones competentes de la Junta de Andalucía, como a Demarcación de Costas. Copia de los mismos se remitirá a la administración local.

Por otro lado, queremos agradecer muy especialmente a la empresa bodeguera Barbadillo, por costear los gastos de cartelería y mallas de protección. Sabemos de antemano que colaboran estrechamente en la protección de este ave protegida, esperando contar con su cooperación en años sucesivos.

Y para finalizar, nos gustaría agradecer el apoyo y la colaboración del Ayuntamiento pero no es el caso, ya que no hemos recibido ningún contacto ni respuesta a nuestras solicitudes.

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