Carmen Álvarez podría sopesar la conveniencia de «dinamitar» todos los puentes que Víctor Mora no quiere cruzar para mejorar Sanlúcar
SD.-Apenas un año se cumple desde que Carmen Álvarez cogiera los mandos de nuestra ciudad con la irremediable anuencia de su socio Víctor Mora y no tener éste otro sostén que le permitiera seguir en algún puesto de importancia , principalmente, para continuarr respirando y mantener viva la llama de un futuro político al que no está dispuesto poner fin llevándose por delante las ilusiones de los miles de sanluqueños y sanluqueñas que depositaron sus votos para tener un gobierno progresista.
En la rueda de prensa de ayer, arropado por sus delegados, -el attrezzo necesario para estas ocasiones- teatralizó el victimismo que arrastra desde que perdió las municipales a manos de una odiada y denostada comunista, escenificando lo que será su oposición a Carmen Álvarez mientras esta lo permita.
Víctor Mora y sus mentores mediáticos, otrora intocables, a los que pagaba muy bien con el dinero de todos los sanluqueños, no pierden ocasión para convencer a la ciudadanía que la mala gestión o la inoperancia tiene nombre de mujer: Carmen Álvarez, alcaldesa de la ciudad, diana para el pimpampum de todos los miembros socialistas del equipo de gobierno que juntos su líder están mostrando una deslealtad e insumisión nunca vistas para desacreditar la gestión de la comunista con acciones propias de un partido político en la oposición y más acordes a las del Partido Popular que a un socio de gobierno, mostrando que no cogobierna para mejorar la vida de todos los sanluqueños sino para seguir manteniendo económicamente una constelación de personas en un presunto ejercicio de nepotismo y clientelismo político que lo ha mantenido en el poder desde 2007.
En la rueda de prensa, el señor Víctor Mora, se erige en defensor único de los trabajadores obviando a quien asumiendo su responsabilidad de custodia del erario público sanluqueño no dará un cheque en blanco a quienes se crean con el derecho a bordear la Ley porque quienes los pusieron ahí no tienen la mayoría democrática para volver al redil municipal con un «caso sobrevenido» que les tape sus vergüenzas.
La suficiencia con la que el teniente de alcaldesa se despacha en sus comparecencias públicas no son más que el reflejo de las propias de alcalde cuando actuaba como tal en los plenos municipales con la entonces principal oposición de IU y por ende con Carmen Álvarez. Su desafío indirecto a la actual alcaldesa, para no tolerar ni permitir ciertas cosas relacionadas con la gestión y recursos económicos de cualquiera de sus delegaciónes, es solo una cortina de humo para no ver la viga en el ojo ajeno. Así pues, sus reiterados llamados a su excelente gestión económica solo oculta el engaño de hacer creer a la ciudadanía que los 108 millones de déficit negativo de tesorería que les dejó el PP han sido liquidados en estos años del gobierno socialista de Irene García y él.
Nada más lejos de la realidad porque hasta el año 2040 los sanluqueños tendrán que pagar una deuda bancaria de más de 60 millones de euros ( 800 euros cada sanluqeño) que se pidieron para pagar a proveedores y eliminar «artificialmente, con ingeniería financiera el remanente negativo de tesorería.
A Víctor Mora no le interesa la limpieza de la ciudad porque, su ausencia, le da los réditos suficientes, ayudado por sus mentiras, para seguir socavando los cimientos de la alcaldesa y su grupo municipal. Pide sin pudor, en una carta a los reyes magos, cantidades exorbitadas de dinero para promover la ciudad a la que Carmen Álvarez no aceptará, al ser prioridad de la primera edil mejorar los servicios públicos antes que dilapidar el dinero de todos los sanluqueños en saraos mitineros promocionales donde luzca palmito y presumir de gestión un teniente de alcaldesa que no se sabe a ciencia cierta a que juega, pero que seguro que cualquier sanluqueño responderá mejor que nosotros sabiendo de su trayectoria política.
El crecimiento exponencial del turismo va en contra de alcanzar objetivos de ciudad amable y medio ambientalmente sotenible, favorece la proliferación de pisos turísticos ilegales que merman el mercado de alquiler para las familias sanluqueñas e imposibilidad de emancipación de los jóvenes que viven en una constante precariedad con sueldos tercenmundistas y abusos empresariales, en definitiva un crecimiento y reparto de riquezas con la balanza desfavorable para los intereses de los trabajadores.
Las delegaciones de fiestas y promoción de la ciudad, dependientes de los socialistas, así como aquella de urbanismo son importantes, pero no serán la cabeza de león en el presupuesto municipal mientras existan carencias que necesitan la contratación de más trabajadores municipales para mejorar las condiciones higiénicas y de infraestructuras de Sanlúcar a las que el PSOE se niega no firmando los nuevos presupuestos municipales que impiden que la ciudad avance, pero eso a Víctor Mora es algo que no le quita el sueño.