Desprestigio Público

José Luis Zarazaga Pérez.-Hoy este humilde desarticulista no piensa tomarse la molestia de analizar los resultados de las elecciones de Madrid, cada uno es libre de votar lo que le dé la gana y si la memoria es débil y se prefieren las payasadas de la Ayuso a reflexionar sobre los miles de ancianos que murieron en las Residencias de Mayores abandonados a su suerte por no tener un seguro sanitario privado, pues allá ellos a mi Madrid me coge lejos y ya lo que me preocupa es el rumbo que está tomando nuestra Comunidad. También tengo que comentar llegados a este punto que se ate Ciudadanos bien las calzas porque “Roma traditoribus non praemiat”. Arrimadas ten cuidado que ya conocemos a alguno de tus generales y puede acabar vendiéndote como un vulgar Viriato.

   Bueno se acabó, cambiemos de tema, Roma no paga a traidores pero no nos equivoquemos Sanlúcar reboza más alegría y dignidad que la ciudad eterna y tampoco paga a traidores.

   Hoy me llama la atención la denigración o menosprecio por todo aquello que podemos considerar como público, no me voy a referir a las políticas que se están aplicando desde las distintas Consejerías para denostar a la educación, la sanidad y todos aquellos servicios que escapan al ámbito de una ciudad  como Sanlúcar y que sería un tema para definirlo como harina de otro costal.

   En un artículo anterior ya comentamos la teoría de la ventana rota para referirnos a la degradación urbana de nuestra localidad, tendremos que aceptar como principio que en Sanlúcar existe una denigración de todo lo que huele a público y como caso curioso podemos llegar a establecer que el máximo potenciador de dicha imagen la lleva a cabo nuestra Concejala Diputada de Izquierda Hundida. En el caso del partido Impopular llegaría a entenderlo ya que todo lo que huele a gestión pública les produce ronchas.

Está descomposición Política que practica una política chapucera y bananera, cuyo altavoz ha saltado de las pintadas en las paredes y las barras de los bares a las distintas redes sociales, donde parece que todo vale, está potenciando el descrédito de instituciones, cargos y los distintos servicios públicos. Estas políticas de sillón son las que lastran el prestigio de cualquier trabajador del ámbito público y así es muy difícil que los servicios públicos que costeamos entre todos puedan prosperar. Es muy cómodo acudir a un Salón de Plenos, arropado por 60.000 buenas razones, para criticar y establecer el no por el no sin aportar ninguna idea ni medida beneficiosa para nuestro pueblo. Esto último lo único que logra es que la mediocridad política lo inunde todo primando el cortoplacismo fácil frente al esfuerzo, la comodidad frente a la responsabilidad y como fin último establecer la prioridad del interés partidista frente a los intereses de los ciudadanos con la vana esperanza de alcanzar algún día el poder.

    Lo siento mucho pero tengo la impresión que esta Descomposición Política va a la deriva y lo único que quiere es convertir la política municipal en un mar de los Sargazos. Está claro que como líderes políticos sobráis, sois la ruina de vuestros partidos y también estoy muy convencido de que contáis con gente muy cualificada intelectualmente y que mejorarían esta forma tan mediocre y bananera de hacer una política de oposición. Lástima que el que vale dentro del grupo está destinado al ostracismo ya que estos  supuestos líderes de partidos a los que se les llena la boca de participación, democracia y valor de lo público solo saben frenar, imponer la disciplina y la jerarquía sobre el debate de ideas. El mediocre siempre buscará que se imponga el interés del líder antes que el protagonismo de las bases.

   Lamentablemente el servicio público en nuestra localidad, cuyo máximo representante son los Ediles que se sientan en nuestro Salón de Plenos siempre ha estado dirigido por “el estás conmigo o estás contra mi” o “el que se mueve no sale en la foto”, practicando esta política hasta el más perfecto de los sistemas de gestión pública acabará corrompido  y su imagen no podrá arreglarse saliendo en las redes sociales con el  mensaje y la fotito de que qué bonito hemos dejado un alcorque o que bien que hemos tapado un bache.

   El ciudadano está cansado queremos ver otra forma de hacer política, queremos más participación, tenemos que volver a recuperar la idea de que lo público es de todos y para todos. Estas actitudes no conducen a nada bueno y al igual que la teoría de las ventanas rotas se convierte en la pescadilla que se muerde la cola, es urgente el cambio en la forma de hacer política y por supuesto es imprescindible que los sanluqueños cojamos con la mano esa bola de manteca y pongamos de manifiesto la importancia de revestir nuestros servicios públicos de una dignidad que nunca debió de perder.

    Como no quiero extenderme y el tema de la degeneración de lo público daría para llenar cinco tomos del Libro Gordo de Petete, finalizare a lo María Jiménez: ¡Se Acabó…….. Por hoy!

   Post Data: Telegrama para la señora Arrimadas. “Rome ne fu pas faite en un jour” (Adolf Tobler); (Roma no se construyó en un día), eso sí: “Roma traditoribus non praemiat”, (Roma no paga a traidores), que dicho en Sanluqueño sería: “ verás lo poco que va a tardar el Marín en pegarte la puñalá y pasarse al partido Impopular al grito antes muerta que sin silla, que maravilla, que maravilla……”

     ¡Coño, con perdón, ya no me extraña nada la imagen negativa de los servicios públicos……….!