Fructífera jornada de anillamiento en el parque San Jerónimo
Los colectivos que se dieron cita ayer domingo en la zona verde “parque San Jerónimo”, Grupo ornitológico Zamalla, Weisshorn destilería, Asociación de Educación Ambiental “Hadiqa”, Ecologistas en Acción y Lucifer-Doñana Gin, quisimos conmemorar el Día Mundial del Medio Ambiente, 5 de junio.
Ante la afluencia de personas, hemos visto repetir esta actividad, varias fechas en el año.
La tan deseada jornada medioambiental en una de las zonas verdes de Sanlúcar, conocida como parque San Jerónimo, se pudo realizar gracias a la colaboración de varias entidades, con el objetivo de hacer un estudio de la biodiversidad que se encuentra en los espacios verdes urbanos.
Para ello, contamos con la participación de un experto anillador, Manuel Vázquez, el cual mediante métodos de captura legalmente autorizados, se analizó el grado de especies que se benefician de las zonas verdes. Tras el estudio de los individuos capturados, 47 aves en total (de las cuales siete especies, Gorrión común, Mirlo, Golondrina común, Verderón, Ruiseñor común, Papamoscas gris y Tórtola turca) se valoró la preocupante disminución de la avifauna que reside en las ciudades. Situación muy alarmante es la que atraviesa el Gorrión común, donde la población se está reduciendo por diferentes factores como la contaminación a través de los vehículos de combustión, la subida imparable de la temperatura, el uso de sustancias cancerígenas en los municipios, como es el glifosato. Durante la jornada se contabilizó varios ejemplares adultos de Gorrión común y en cambio jóvenes de este año, tan sólo hubo dos individuos, eso hace como indicador la situación de emergencia climática a la que estamos inmersos.
Las zonas verdes en las ciudades, son espacios de importante valor que actúan como filtros naturales para mejorar la calidad del aire reduciendo la contaminación de la atmósfera; dar sombra reduciendo la temperatura global del municipio; pero además sirven como isletas verdes para dar cobijo a multitud de especies, auténticos plaguicidas naturales donde gracias a su alimento, los insectos, evitan la proliferación de enfermedades hacia el ser humano. Como dato a recordar, debemos de tener un árbol por cada tres habitantes y un mínimo de entre 10 y 15 metros cuadrados de zona verde por habitante, según la Organización Mundial de la Salud.
La esperada actividad de educación ambiental dirigida a la ciudadanía en general y muy especialmente a los más peques, ha sido un éxito en participación, primero cumpliendo las medidas sanitarias y segundo que además de desarrollar una jornada anillamiento y taller de identificación de aves, se ha llevado a cabo una limpieza simbólica de residuos sólidos urbanos que se han ido depositando con el paso del tiempo, debido a la falta de civismo de algunas personas. La cantidad recogida, ha sido alrededor de unos 200 kilos de basura, entre plásticos de uso doméstico, vidrio y a destacar varias cubiertas de vehículos, residuos altamente tóxicos.
Durante la realización del evento, hemos valorado la conservación de esta zona verde, como la protección de los últimos vestigios de la Barranca que rodeaba a Sanlúcar, antiguo acantilado formado por la erosión del oleaje hace 6500 años, formada de arenas rojas cuarzosas y por su singularidad tienen que estar protegida.
Para finalizar, todos los presentes hemos coincidido que el Ayuntamiento de Sanlúcar debe de realizar campañas de sensibilización de limpieza en la ciudad y la colocación de más paneles informativos, prohibiendo el arrojo de basura. Por supuesto, habría que empezar a concienciar primero en los centros educativos.