Un poderoso árbol de la libertad homenajea a Narciso Climent

• El acto contó con más de 300 personas que quisieron rendir homenaje al ilustre sanluqueño. Sin embargo, la Junta de Andalucía prohibió la entrada al instituto, espacio público y casa de esta comunidad educativa

La delantera del IES Francisco Pacheco acogió el pasado sábado la inauguración de un monumento de homenaje a título póstumo al docente sanluqueño e insignia de oro de la ciudad Narciso Climent. En el acto estuvo presente al alcalde, Víctor Mora, acompañado de familiares, autoridades y miembros de la comunidad educativa. En total, más de 300 personas rindieron homenaje al que fue un ilustre promotor de la libertad, la sabiduría y el aprendizaje en la ciudad.

Por desgracia, la Junta de Andalucía afeó este homenaje prohibiendo realizarlo dentro del centro que fue casa de este ilustre sanluqueño. Sin ofrecer ningún tipo de justificación al respecto, la delegación Territorial de Educación no permitió la entrada al aparcamiento del Instituto Francisco Pacheco para que los impulsores del homenaje pudieran expresarse en este emotivo momento, que debió trasladarse a una plaza de la zona cercana del parque de los Montañeses.

Desde el sábado, la rotonda más cercana al centro luce un árbol de acero, representado a través de ramas, frutos y semillas, que refleja que sanluqueños crecen para ser libres como la misma naturaleza “para no perder las raíces, darles sombra a los que buscan cobijo, para poder ir a por las ramas sin dejar de formar parte de un poderoso tronco”

Al pie de este reza: “De tus raíces, Narciso, nuestras ramas”. Unas palabras que dan sentido a la vida del homenajeado. Porque Narciso Climent “fue, es y será un árbol con raíces, tronco, ramas, frutos y semillas, que explican su vida y nuestras vidas”, dijo Pepe Jurado en nombre de los impulsores de este homenaje. El árbol es una creación de Garikoitz Cuevas y Memé Perales.

El alcalde, Víctor Mora, comenzó su intervención haciendo alusión a los tintes políticos que la Junta de Andalucía intentaba salpicar en este homenaje con la negación del espacio público “el acto estaba previsto que se pudiera hacer donde fue casa de Narciso y de muchos de nosotros y nosotras. Sus motivos tendrán, no los entendemos, pero nada va a enturbiar este gran reconocimiento para todos y todas”. 

Para Mora, este reconocimiento nace de “amigos, amigas, que aprendimos recibiendo clases de Narciso, que era amigo más allá de las aulas. Hoy recordamos también al profesor y escritor, quien fue cronista de Sanlúcar. Una persona que dio mucho a la ciudad”. Además, el alcalde quiso recordar que “él sabía que tenía el reconocimiento de Sanlúcar, se lo demostraban en las calles, pero, además, tuvo el honor de recibir en vida, junto a su familia, el máximo reconocimiento de esta ciudad”.

El alcalde quiso también explicar la importancia de materializar este cariño y esta entrega de Sanlúcar lo más cerca posible de la que fue casa del sanluqueño, el IES Francisco Pacheco. “A quienes lo conocimos y quienes tuvimos la suerte de que nos diera clase nunca se nos va a olvidar. Lo tenemos en la mente y lo tendremos todos en el corazón. Pero es que, además, aquellos que pasen por aquí y se pregunten qué representa ese árbol sabrán que representa a un gran sanluqueño, a una gran persona y a un gran amigo de todas y de todos que siempre llevaremos en el corazón”.